Estamos enseñando a nuestros niños que no está bien llorar, a nuestras niñas que no está bien cabrearse. Mira las consecuencias.
Sexualizar los sentimientos puede haber tenido una utilidad en la evolución humana; no ser capaces de expresarlos, puede ser un desastre emocional en la vida de muchas personas. Si opinas igual, comparte este vídeo.
Original: Por The Representation Project
Por Fran García